Como REALIZAR UN TEMA

ORGANIZACIÓN DE TEMAS DE DESARROLLO

EL DESARROLLO DE UN TEMA DE HISTORIA, de forma adecuada para una prueba (Selectividad, Reválida, etc.), debe estar bien organizado, ser claro y lo más completo posible. Obviamente, la mejor manera de solventar esta cuestión empieza por dominar conceptualmente los contenidos del tema. Sin embargo, no basta con saberlos, sino que debemos exponerlos de la mejor manera para quien nos lea lo valore positivamente en forma (presentación, buena letra y ortografía…) y contenido (científico, organización de apartados, ideas esenciales, etc.).

En términos básicos debemos seguir unas pautas y dotar al texto de una estructura, que aunque sea simple, nos ayude a desarrollarlo. Aunque el desarrollo del tema se hace en forma narrativa, sin marcar grandes epígrafes (aunque se puede hacer), debemos organizar perfectamente nuestro discurso implícitamente para que no falte nada. En este tenor la organización del tema debe hacerse de la siguiente manera:

1.- Introducción del Tema:
- Cronología y definición: al comienzo del tema debemos rápidamente definir y explicar qué es (Sexenio Democrático, La Crisis del 98, La Transición…) y de que trata el tema que vamos a desarrollar. Explicar el marco cronológico y espacial en el que se desarrolla; con la mayor precisión posible.
- Antecedentes: todos los temas tienen antecedentes, contextos anteriores y posteriores. Conviene explicar en el comienzo del tema, de forma sucinta, cuáles son los acontecimientos previos que han dado lugar al tema que vamos a desarrollar (pues son factores determinantes y condicionantes de los hechos históricos). Lógicamente, si desarrollamos la Prehistoria, necesariamente tenemos que aludir al proceso de evolución de los homínidos y estadios geológicos anteriores; si desarrollamos La Guerra Civil, habrá que referirse necesariamente al contexto anterior de la II República, etc.
- Valoración general: conviene en el inicio del tema plantear la relevancia que tiene el tema que vamos a exponer en el contexto de la Historia General de España. Dejar bien clara desde el principio la significación histórica y la importancia en relación a otros temas .
- Esquema del Desarrollo: en la introducción conviene, antes de empezar el desarrollo propiamente dicho, en profundidad, indicar a manera de índice los apartados que se van a tratar en la secuencia que se va a hacer; e inmediatamente comenzar con el desarrollo.

2.- Desarrollo:
- Desarrollar todo el contenido, de forma amplia, en diferentes epígrafes o apartados de que consta. Debe ser correcto (científicamente; no inventar), con buen discurso y claridad. Procurar una línea lógica y secuencial de los acontecimientos, con incidencia en aspectos y estructuras fundamentales del tema (sociedad, política, economía, cultura…). Identificación y comprensión de los elementos de causalidad que se dan en los procesos de evolución y cambios relevantes para una determinada configuración histórica. Es imprescindible el empleo apropiado de terminología y vocabulario histórico.

3. Conclusión y valoración
La conclusión y valoración final del tema exige una recopilación sumaria (no muy extensa, pero sí intensa en síntesis de lo más notorio) de las ideas principales del tema: las más relevantes, las que suponen una comprensión de la significación general de los contenidos.
De otra parte, en este apartado se debe enlazar la terminación de los hechos últimos con el tema siguiente, para que se comprenda que en la Historia existe una línea de continuidad (no ocurren las cosas por separado, sino en una secuencia lógica).
Finalmente se concluye el tema con una valoración personal de la significación y trascendencia de la etapa histórica que hemos explicado.