Ante el falló del consumo y de la confianza de los inversores en toda Europa se produjo una crisis bursátil, de tal intensidad que en toda la historia no se recuerda un periodo de represión como este. A partir del último trimestre de 1929 se produjeron fugaces reacciones provocadas por el descenso de los valores inmobiliarios. Entre agosto y septiembre la especulación alcista fue cada vez mas brusca, haciendo que la bolsa de Nueva York fuera responsable de que los grandes negocios se desplomaran arrastrando con ella a las industrias que dependían de los créditos. El pánico que generó esta situación afectó también a las bolsas europeas que empezaron a decaer progresivamente y de manera muy brusca. Pocos meses después la mala situación industrial produjo una gran crisis económica mundial. Esta crisis tuvo su origen en la disminución del volumen de los negocios que cada vez su movimiento comercial descendía más rápidamente, en el descenso de los precios de las materias primas que cada vez estaban peor consideradas disminuyendo los beneficios obtenidos a causa del gran coste de producción; particularmente en los principales cultivos internacionales: trigo, algodón, azúcar, café etc. La peor consecuencia de esta crisis se manifestó en el paro. Todas estas causas eran responsables del bajo rendimiento de los negocios que se veían obligados a cerrar por los bajos beneficios obtenidos e incluso las perdidas que sufrían gran parte de ellos. Otros hechos perjudicaron más aún nuestros mercados, como hechos de carácter político y social y algunas circunstancias locales que la bolsa ha registrado sin excepción. Entres ellos destaca el cambio del régimen político de España. El dinero de la bolsa seguía dando temor y desconfianza respecto a la situación política a pesar de todas las promesas expuestas por los gobiernos. Esta desconfianza dio lugar al desorden público, conflictos sociales y huelgas por parte de los comerciantes siendo estos los principales afectados de esta gran crisis, desconfianza a la cual hay que culpar la emigración de capitales extranjeros. Ante esta situación no era posible una rápida mejora económica mientras no se solucionaran las causas que habían provocado la actual crisis, pero la mas prioritaria era el restablecimiento de la confianza en la política del gobierno para que el dinero abandonase el temor que provocaba la mala situación del país y de sus ciudadanos. Mientras el sistema capitalista fuese la base del país era necesario asegurar que no se atentaría contra el capital de una manera injusta, ya que de lo contrario la economía del país se vería gravemente perjudicada. Azahara, 1º Bach-B